Un gran placer para todos los sentidos es poder descubrir Ámsterdam, sus canales, puentes y hermosos edificios.
Descubrir Ámsterdam
Está es una ciudad europea muy joven, de hecho su casco antiguo data del siglo XVII, momento cuando se vivió su Siglo de Oro y de mayor esplendor económico. Es un lugar muy agradable de conocer y de perderse por sus canales, pararse a mirar desde cualquier puente, o sentarse en un banco a orillas de las aguas que han tenido que controlar en su historia, para ganarle terreno al mar y crear esta bellísima ciudad.
Nos iremos dando cuenta de su encanto a cada paso, y del aire que se respira en ella de libertad y tolerancia, Además nos podremos fijar en que sus habitantes gustan de hábitos sencillos, como tomar algo en la puerta de su casa o en una terraza, o del simple paseo en bicicleta junto a un canal.
Para descubrir la ciudad podemos ir a pie, en bici o usando sus eficientes medios de transporte, pero debemos tener claro que casi todos los sitios de interés están cerca. Otra forma de ver la ciudad es darse un paseo en barco, y obtener una perspectiva diferente y especial, mientras navegamos por sus mágicos canales.
Algunos de los lugares que captaran especialmente nuestra atención son, a parte de los muchos bellos rincones de Ámsterdam, los museos de Van Gogh, el Rijksmuseum, o el Stedelijk, o la evocadora Casa Museo de Ana Frank, así como pasear por el Barrio Rojo o el evocador Barrio de Joordan, y muchos otros sitios más.