Los tranvías de San Francisco también conocidos como Cable Cars, son una gran atracción turística de la ciudad.
Tranvías de San Francisco o Cable Cars
Sus famosos Cable Cars sustitueron hace ya más de un siglo a los carros de caballos que acaba exhaustos de subir sus empinadas calles. Los turistas los usan para comprobar esta autentica experiencia, al subirse a los históricos tranvías que aún recorren San Francisco.
Se crearon en el año 1874 de mano de Andrew Hallidie inspirándose en los vagones de las minas, para poder sustituir los coches de caballos. No llehgan a todas las zonas de la urbe, hay tres rutas principales que son la California, la más popular y famosa Powell-Hyde y la que recorre Mason-Taylor.
Una de sus curiosidades que llaman la atención a los turistas es cuando en los finales de trayecto, se cambia la dirección del tranvía a mano.
Este se sitúa sobre un plato giratorio; y en ese instante el operario se baja, y empuja al tranvía desde uno de los estribos, consiguiendo girarlo para iniciar el trayecto en la dirección contraria a la que había traído.
Aún quedan bastantes históricos tranvías, es algo que siempre hay que utilizar y ver en nuestra visita.
Una foto típica es la que podemos hacer en la línea que recorre Hyde, al llegar a la cima de esta calle en dirección a Fisherman´s Wharf se divisa la bahía de San Francisco, sus empinadas calles y al fondo la prisión de Alcatraz.
Los billetes se pueden comprar a bordo de los mismos.
Existe un Museo donde nos explican la historia de los Cable Cars, y es que son un verdadero icono de la ciudad.