Descubrir Lisboa es recorrer esta bella ciudad con una ruta que se antoja imprescindible, que va llevándonos por todos sus rincones.
Nuestro itinerario puede comenzar por el entorno de popular la Plaza del Comercio, que servía de entrada a la ciudad, desde donde partimos hacia el centro de la ciudad para adentrarnos en su pasado.
Antes echaremos la vista al mar y a la desembocadura del Tajo, desde donde antiguamente arribaban los barcos mercantes. Al pie de la Plaza, vemos el Muelle de las Columnas que hace de balcón frente al Tajo.
La plaza se abre a la Rua Augusta a través de un arco de triunfo neoclásico, donde veremos el monumento en honor a San José.
Dejando al Tajo atrás y al antiguo puerto de la ciudad que estaba junto a la vieja Praça do Comercio, proseguimos nuestro camino hasta el popular Café do Arcada do Marhino donde se halla la mesa en la cual el poeta Fernando Pessoa escribió Mensagem.
Más tarde iremos adentrándonos en sus típicas callejuelas del casco histórico hasta llegar al monasterio de los Jerónimos, por la zona también hay que acercarse a ver la famosa Torre de Belem, obra de Francisco de Arruda y que es considerada como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
Hay mucho por ver como para definir una ruta concreta, hay que acercarse a la plaza del Rosario en la parte baixa, descubrir la catedral de Lisboa y antes o después subir a la zona alta, donde se erige el Castillo de San Jorge y poco a poco, sin prisa pero sin pausa ir conociendo el resto de atractivos de esta histórica ciudad.
Mapa de Lisboa