La iglesia del Gesú es el principal templo de los jesuitas en Roma, el diseño de la iglesia fue el prototipo de las iglesias de la Contrarreforma.
Iglesia del Gesú
Financiada por el cardenal Alejandro Farnesio, se comenzó a construir en el año 1568 por el arquitecto Vignola, siendo terminada por Giacomo Della Porta. Como represento el nuevo modelo de iglesia, sobre todo de la compañía de Jesús, que ha sido imitado hasta el siglo XX, podemos decir que cuenta con numerosas innovaciones.
Incluso, se estima que su diseño fue el preludio de la arquitectura barroca, que años más tarde añadiría más elementos ornamentales. Cuenta con una grandiosa fachada y una cúpula, atribuidas a Della Porta. La planta es de cruz griega, con tres naves correspondientes a sus tres puertas. Su estilo arquitectónico es renacentista, mientras que su ornamentación es barroca.
En la fachada vemos dos escudos y dos estatuas que flanquean el acceso principal a la Iglesia del Gesú. En la misma, se puede apreciar la diferencia de anchura entre sus dos niveles.
Del interior nos llama la atención su rica decoración a base de mármoles, bronces, dorados y frescos que nos muestran la clara suntuosidad del gusto jesuita. Su gran bóveda esta repleta de bellos frescos, entre los que destaca el triunfo del nombre de Jesús. Además, hay varias capillas dispuestas en las naves laterales, en las que podemos admirar múltiples frescos, lienzos, urnas, relicarios y otros elementos decorativos.
En la iglesia del Gesú estaba todo pensado para facilitar la reunión de un numeroso público, y la alta posición de su altar permitía seguir a todo el mundo la misa. Es una de las grandes iglesias que debemos visitar en Roma.