Este bonito palacete almohade debe su nombre al río Genil que pasa muy próximo al mismo, se fecha su construcción en torno a 1219, siendo el Alcázar Genil un lugar destinado al recreo de la corte.
Alcázar Genil
De sus arquitectura inicial se conserva su pabellón central que es de planta cuadrada al que se adosaron las alcobas laterales y el pórtico que es de arco de herradura apuntado.
El tamaño original del edificio era mucho mayor, y este se caracterizaba por los hermosos jardines y fuentes donde se celebraban grandes recepciones y se recreaban batallas navales en un gran estanque.
En su interior, entra la luz por las cinco pequeñas ventanas que hay en cada uno de sus muros y se consigue una tenue iluminación. En la sala central encontramos una fuente que se comunicaba con una gran alberca.
El suelo era originalmente de ladrillo y cerámica vidriada, que era lo habitual en las casas hispanomusulmanas, pero hoy en día lo encontraremos de mármol.
Llama la atención su bella decoración interior con estucos y azulejos de forma similar a la Alhambra, además de un artesonado de lacerías con un llamativo friso de mocárabes que remata el conjunto.
En el Alcázar Genil vivió la madre de Boabdil hasta la toma de Granada por los Reyes Católicos y actualmente acoge la Fundación Francisco Ayala, escritor y pensador oriundo de la ciudad.